Y tanto es lo que me hace sentir
que ahora forma ya parte de mi
no soy feliz si no siento su luz.
Y los que inventan otra realidad
nunca se han parado ni a pensar
que entre los dos no cabe mas amor.
Si esto no es amor
OBK. Grupo español formado en 1983. De todas las canciones que he escuchado sobre relaciones gays ésta en sin duda la que más me gusta. Yo que he abdicado de cualquier militancia, asqueado como estoy de tanta loca hipermusculada e hiperdepilada, siento sin embargo cierta complacencia al escuchar esta canción y recordar lo que sentí cuando regalé este disco al hombre al que aún amo über alles.
Y si mi homofobia ya no me deja soñar con jóvenes leopardos que me arañen el pecho como a Walt Whitman al menos no me impide indignarme, o fingir que me indigno, ante majaderías como las del reverendo Mullen, capellán de la Bolsa de Londres, que en vez de estar muy atareado dando soporte espiritual a los que se están arruinando con las acciones, se le ha ocurrido la brillante idea de tatuar a los gays previniendo de su peligro como las cajetillas de tabaco, con frases como la felación mata.
En fin, hay cosas que ni en el mundo fantástico que imaginara la Espe tendrían cabida, pero que haya mentes desquiciadas de este jaez nos lleva a la conclusión de que mucha de la tolerancia que se predica y se exhibe es más fachada que otra cosa. Que los que nos rodean se llenan la boca de colegueo pero poco les cuesta soltar la puya y la gracia que en ninguna otra circunstancia harían.
Ante tanta sinrazón me ayuda recordar lo que significa que te guste tanto alguien que se te olvide su rostro y el único problema que te ocupa todas las horas del día es tratar de recordarlo. Y esta canción me pone música a ese recuerdo…
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2 comentarios:
Sepa usted que me he suscrito por rss a su blog ya que se empeña (con acierto) en que entremos en él en vez de mandarnos la información via mail. Le fecilito y bienvenido a la tecnología. Gracias por la canción. No eres el único al que le trae recuerdos.
Pasarte la vida escapando de lo que eres y sientes es doble condena. Abrir armarios, derribar muros y saltar vallas es complicado, pero necesario.
Reivindicar la autenticidad, la normalización, la no exclusión es necesario. Es imprescindible. Cada cual como sienta y sea, cada cual ocupando su espacio, el que le corresponde como miembro de la sociedad en la que vivo.
Nada me gustaría más que un amigo que tenemos común, diera el paso por iniciar la batalla. Te aseguro que todos nos íbamos a sumar a la lucha a su lado.
Besos.
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